El juez federal Sergio Torres, en una resolución de 400 páginas, sostuvo que la organización criminal compraba cada semana al menos 70.000 euros en una agencia de La Matanza
El negocio siempre dio importantes réditos económicos. Al principio, la ganancia en pesos argentinos era cambiada por dólares estadounidenses. Pero después hubo una decisión de reducir el volumen de dinero para que sea más fácil su almacenamiento: canjear los billetes nacionales por euros. Cada semana la poderosa organización narcocriminal que domina la villa 1-11-14, en el Bajo Flores, presuntamente liderada por el ciudadano peruano Marco Estrada Gonzáles, conocido por los apodos de «Marcos» y «Padrino», tenía a su disposición 1.225.000 pesos que eran utilizados para comprar la moneda europea.
Es decir que esa organización criminal de narcomenudeo recaudaba, en promedio, cinco millones de pesos mensuales y su ganancia anual puede estimarse en al menos 60 millones de pesos.
Así se desprende de la resolución firmada por el juez federal Sergio Torres, que procesó a «Marcos» Estrada Gonzáles y a su mujer, Silvana Salazar, al considerarlos organizadores de una cadena destinada al tráfico ilícito de estupefacientes y por el delito de acopio de armas de fuego. Sus bienes fueron embargados hasta cubrir la suma de 4.500.000 de pesos.
Según la resolución del juez Torres, que desde 2010 investiga a la poderosa banda narco que se hizo fuerte en la 1-11-14, los euros eran adquiridos en una agencia situada en Villa Celina, en La Matanza. El magistrado sostuvo que la persona encargada de adquirir la moneda extranjera era Gladys Santos Carhuachín, una ciudadana peruana de 45 años, que también fue procesada.
«Quedó asentado a lo largo de la extensa pesquisa desplegada por los investigadores que Santos Carhuachín, -o cualquiera de sus colaboradores-acudía, al menos una vez por semana, a la agencia a efectos de cambiar dinero por divisas extranjeras. En un primer momento, el cambio de los pesos argentinos era por dólares estadounidenses. Sin embargo, con el avance del tiempo se comenzó a adquirir euros. Ello no resulta llamativo si se tiene en cuenta que la moneda de la Unión Europea ofrece billetes de 500 euros, lo que posibilita reducir el volumen del dinero obtenido; considerando, claro, que los montos que la imputada cambiaba, generalmente, rondaban los 70.000 euros semanales», afirmó el juez federal Torres en la página 320 de su resolución.
«Marcos» Estrada Gonzáles, su mujer, Santos Carhuachín y otros 22 sospechosos que también fueron procesados fueron detenidos el 16 de diciembre pasado en operativos hechos por detectives de la División Operaciones Especiales Antidrogas de la Policía Federal Argentina. Ese día, el valor del euro era de 17,50 pesos argentinos por unidad. Es decir que para comprar 70.000 euros, la banda criminal tenía que entregar $ 1.225.000.
Según la investigación del juez federal Torres y de su equipo de colaboradores, la contabilidad de la organización criminal estaba registrada en una libreta secuestrada en la agencia de La Matanza.
«Estrada Gonzáles y su mujer eran quienes diseñaban la modalidad operacional de la banda y recibían el mayor porcentaje de lo producido económico de la actividad ilícita», afirmó Torres, en la resolución a la que tuvo acceso LA NACION.
En parte de las 400 páginas de su resolución, el juez Torres hizo un resumen de la historia criminal de la organización presuntamente liderada por «Marcos». Desde 2010 el magistrado identificó a más de 150 sospechosos vinculados con ese grupo, que habría comenzado a operar en el Bajo Flores en 1996. En diferentes juicios en los tribunales de Comodoro Py fueron condenados más de 60 imputados. El propio Estrada Gonzáles, en un juicio abreviado donde admitió su culpabilidad, recibió una pena de seis de años de cárcel, pero en 2013 recuperó la libertad.
«Resulta trascendente señalar que la organización criminal analizada habría logrado a esta altura un grado de andamiaje y coordinación tal que le ha permitido mantenerse erguida en el tiempo, pese a los esfuerzos estatales por resquebrajar su estructura y poner fin a la concreción de los delitos en estudio», afirmó el juez.
Estrada Gonzáles vivía en Ezeiza. Era vecino del actual intendente de ese distrito bonaerense y ex ministro de Seguridad, Alejandro Granado. Pero, según los investigadores judiciales y policiales, cuando visitaba la villa 1-11-14 concurría al restaurante Ramos, antes llamado El Cuervo. El local gastronómico era el punto de encuentro de «los altos estrados de la empresa criminal».
«Marcos», el procesado como jefe narco
Marco Estrada González: acusado
Edad: 53 años
Origen: Perú
Hasta su arresto, ocurrido el 16 de diciembre, vivía en un barrio cerrado de Ezeiza. En un juicio abreviado admitió su culpabilidad y recibió una condena de seis años de prisión. En 2013 recuperó la libertad. El juez federal Sergio Torres lo procesó y trabó un embargo sobre sus bienes hasta cubrir la suma de 4.500.000 pesos.
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